miércoles, 25 de marzo de 2009

¡Cuidadme, por favor!

Se llama Elkey su madre la ha abandonado. Por eso, los trabajadores del zoo donde nació se han convertido en sus progenitores.


No es habitual que un primate rechace a su cría, aunque su peculiar color pelirrojo pudo provocar el abandono.



Foto: Daniel Muñoz/REUTERS | Vista en 20 Minutos.
Video: ATLAS| Visto en Público

1 comentario:

Arcángel Mirón dijo...

¿De verdad lo abandonó por el color? Dios mío, pensé que sólo los humanos éramos capaces de semejantes bestialidades.