La bebé gorila Kibibi, de siete meses, juega sentada en el regazo de su madre, llamada Mandara, una gorila occidental de llanura, en un zoo de Washington (Estados Unidos).
No creo que exista en el planeta un animal que se parezca mas al humano pero con un instinto incluso mas superior al nuestro a la hora de criar a su bebe y a la hora de defenderlo. Me parecen muy sensibles a pesar de su aspecto y siempre me traen recuerdos de Gorilas en la niebla.
2 comentarios:
No creo que exista en el planeta un animal que se parezca mas al humano pero con un instinto incluso mas superior al nuestro a la hora de criar a su bebe y a la hora de defenderlo.
Me parecen muy sensibles a pesar de su aspecto y siempre me traen recuerdos de Gorilas en la niebla.
MªJose: Huelga decir que estoy completamente de acuerdo contigo: nos parecemos muchísimo, pero en algunos aspectos deberíamos tomarles como ejemplo.
Un saludo.
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