jueves, 15 de octubre de 2009

Pescadores asturianos tratan de exterminar una especie invasora dañina

Hace ya unos 15 años que aparecieron los primeros ejemplares de cangrejo rojo o americano (Procambarus clarkii) en la cuenca del río Narcea (Asturias). Desde entonces, la población de esta especie con una extraordinaria capacidad reproductora y una voracidad extrema se ha multiplicado. La Asociación de Pescadores El Bazao puso en marcha el año pasado el Proyecto Cangrejo para reducir la población de esta especie en la cuenca.

La campaña de 2008 se saldó con algo más de 15.000 ejemplares capturados, y este año se prevé duplicar esa cifra.


Las capturas son sacrificadas a pie de río arrancándoles la médula espinal, tal y como dicta la normativa para evitar nuevas colonizaciones, aunque buena parte de los animales se donan a instituciones públicas y a particulares para fomentar su consumo en la cocina y la pesca deportiva, que contribuyen a la erradicación.

Razones que justifican el exterminio

Los predadores naturales del cangrejo americano son la nutria, la garza real y los salmónidos adultos, pero no parecen haber sido suficientes para poner cerco al frenesí reproductor de esta especie. Como consecuencia, se ven afectadas especies como el salmón atlántico, la anguila europea, la lamprea, la trucha migratoria y común, así como todo tipo de anfibios e invertebrados.

Además, el cangrejo rojo es portador de una bacteria contra la que está inmunizado; no así el cangrejo autóctono, para el que este microbio es mortal. Aunque en Asturias aún no ha sucedido, el cangrejo americano escarba madrigueras, lo cual, según se ha constatado, ha llegado a cambiar el pH de algunas aguas.

Los responsables de la iniciativa inciden en la importancia de la labor de divulgación sensibilizando a la sociedad de los gravísimos riesgos que supone la introducción de especies exóticas en hábitats impropios. De hecho, se cree que los primeros ejemplares de cangrejo rojo se introdujeron en el embalse de Calabazos por la acción bienintencionada de algún pescador que quería contribuir al ecosistema, facilitando alimento a los salmones.

Para contribuir a ello, el Proyecto Cangrejo se da a conocer a través de charlas y conferencias, y cuenta con un blog en Internet.

Además de los beneficios ecológicos que aporta el proyecto, desde la Asociación de Pescadores se valora muy positivamente el desarrollo rural al que ha contribuido, con la creación de varios puestos de trabajo.

¿Y tú, qué opinas al respecto?
¿Es esta la mejor manera de acabar con el problema?

Puedes leer la noticia original, en su medio de procedencia.

4 comentarios:

Furacán dijo...

Hace tiempo le dediqué una entrada en mi blog a esta especie. Aquí también los hay a patadas.
No sé si es la mejor manera de resolver el problema o no, no se me ocurre otra alternativa pero tampoco sé si esto es muy efectivo.

Ralph dijo...

El hecho de si es más o menos efectiva la campaña se verá con el tiempo, pero la eliminación de 1500 ejemplares servirá por lo menos para ralentizar su propagación. Saludos.

aliere dijo...

No he podido evitar recordar aquella plaga que organiza Bart en Australia con la rana que se lleva consigo, tal vez porque he comentado algo sobre eso hoy en el blog.

Creo que es una buena muestra de cómo las especies exóticas pueden alterar un ecosistema y no se me ocurre realmente una manera mejor de intentar atajar un poco el problema. Quizás no sea mala idea lo de fomentar su uso en la cocina, si está bueno a la plancha y a un precio razonable podríamos esquilmarlo pronto, que con la que está cayendo no están los bolsillos para muchas mariscadas.

En cualquier caso una entrada muy interesante. Saludos.

Capitán Clostridium dijo...

Este tipo de problema es muy difícil de erradicar. Lo mejor que se puede hacer es haberlo evitado.

Los equilibrios ecológicos son muy frágiles. No sé si sería buena solución aumentar sus depredadores naturales, la verdad.