viernes, 25 de marzo de 2011

Cadena de favores entre mariposas, hormigas y flores

Una mariposa amenazada que pone sus huevos sobre la flor de la pimpinela y una hormiga que las "adopta" hasta su edad adulta -sin saber que su recompensa será la muerte de sus propias larvas- forman el frágil triángulo ecológico que intenta salvar el Bosque Modelo de Urbión, el único de esta categoría existente en el país.

La población de la Phengaris nausithous (hormiguera oscura), una mariposa que en sus primeros estadios de vida se alimenta de la pimpinela, ha sufrido un gran declive. La razón de su progresiva desaparición estriba en algo tan sencillo como la variación del periodo de pasto del ganado de la zona.

Ello ha supuesto que la planta "no llegue a florecer", con lo cual la mariposa no puede depositar sus huevos en la flor de la pimpinela (Sanguisorba officinalis) y se rompe el ciclo.

Las larvas de la mariposa permanecen y se nutren de la flor durante un tiempo, hasta que se dejan caer al suelo con la intención de ser recolectadas por las hormigas del género Myrmica. Si las larvas fueran recolectadas por otra hormiga serían devoradas, pero las Myrmica las cuidarán y alimentarán. Esto sucede porque las larvas de la mariposa segregan una sustancia de olor similar al de las hormigas.

Después, y tras devorar a las larvas de sus 'madres' adoptivas junto a las que reposan en el hormiguero, las mariposas "crisalidarán" hasta la primavera siguiente. Por otro lado, la vida de la hormiga depende del ganado vacuno o de la siega de los pastos para que la hierba y también la pimpinela mantengan las condiciones adecuadas para ellas.

Por todo esto, el proyecto para proteger el bosque busca cerrar acuerdos con los ganaderos de los Montes de Urbión.

¿Qué es un bosque modelo?

Los llamados bosques modelo como el de Urbión -que abarca una treintena de municipios de Soria y Burgos- se caracterizan por integrar en su gestión a todos los agentes de la zona, desde vecinos a empresas y administraciones.

En el caso de Urbión, el 50% de su población vive del sector de la madera y de otros aprovechamientos forestales, por lo que hay una fuerte vinculación al bosque y ello ha determinado buena parte de su cultura y tradiciones.

La Sierra de Espuña (Murcia), la provincia de Salamanca y los Pinares de Coca (Cuenca) también han mostrado su interés por convertirse en bosque modelo, una iniciativa que surgió en Canadá en los años 90.

1 comentario:

Susana Terrados dijo...

¡Qué curiosa cadena! es hermosa esta naturaleza, tan increible.
Ojalá que se pueda resolver el proble...sería una pasito para adelante.
Besitos.