Investigadores del Zoológico de San Diego, en Estados Unidos, están llevando a cabo un estudio de lo que dicen es un "lenguaje secreto" de los elefantes a través de la monitorrización del modo en que los animales se comunican, según parece, con un sistema que el ser humano no es capaz de escuchar.
El bramido que hace el elefante con su trompa es un sonido familiar para muchas personas, pero los animales también emiten gruñidos que son sólo audibles parcialmente, ya que dos terceras partes del llamado se llevan a cabo en frecuencias que son demasiado bajas para ser detectadas por nuestro oído.
Para entender más sobre esta parte inaudible del gruñido, el equipo de científicos adhirió a ocho de las hembras del zoológico un micrófono sensible a estas frecuencias y un sistema de rastreo de GPS. Después compararon los ruidos que los animales estaban haciendo con la actividad que estaban llevando a cabo.
Además de descubrir que las elefantas "hablan" sin parar y su jerarquía dentro de la manada demuestra qué tan parlanchinas y activas son, encontraron que la elefantas utilizan un gruñido de baja frecuencia (que inicialmente se pensaba sólo utilizaban para llamar a los machos cuando estaban listas para aparearse) para llamarse entre ellas. Y es que, aunque ya se sabía que las hembras elefantas suelen formar un círculo protector alrededor de la madre embrazada que va a dar a luz, los científicos descubrieron ahora que la madre "informa" al grupo cuando el bebé está a punto de nacer.
Aunque todavía faltan detalles por averiguar, los científicos piensan que este sistema de comunicación también les sirve sirve para advertir a los elefantes que tengan cuidado con los depredadores. Por eso, el equipo continuará analizando la información para obtener más claves sobre el peculiar 'lenguaje secreto' de los elefantes.
El bramido que hace el elefante con su trompa es un sonido familiar para muchas personas, pero los animales también emiten gruñidos que son sólo audibles parcialmente, ya que dos terceras partes del llamado se llevan a cabo en frecuencias que son demasiado bajas para ser detectadas por nuestro oído.
Para entender más sobre esta parte inaudible del gruñido, el equipo de científicos adhirió a ocho de las hembras del zoológico un micrófono sensible a estas frecuencias y un sistema de rastreo de GPS. Después compararon los ruidos que los animales estaban haciendo con la actividad que estaban llevando a cabo.
Además de descubrir que las elefantas "hablan" sin parar y su jerarquía dentro de la manada demuestra qué tan parlanchinas y activas son, encontraron que la elefantas utilizan un gruñido de baja frecuencia (que inicialmente se pensaba sólo utilizaban para llamar a los machos cuando estaban listas para aparearse) para llamarse entre ellas. Y es que, aunque ya se sabía que las hembras elefantas suelen formar un círculo protector alrededor de la madre embrazada que va a dar a luz, los científicos descubrieron ahora que la madre "informa" al grupo cuando el bebé está a punto de nacer.
Aunque todavía faltan detalles por averiguar, los científicos piensan que este sistema de comunicación también les sirve sirve para advertir a los elefantes que tengan cuidado con los depredadores. Por eso, el equipo continuará analizando la información para obtener más claves sobre el peculiar 'lenguaje secreto' de los elefantes.
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5 comentarios:
Es muy interesante la forma de comunicación de los elefantes, tanto por los infrasonidos como por las patadas en el suelo que transmiten las ondas hasta a 30 Km de distancia.
Dediqué una entrada a los elefantes en mi blog e intenté explicarlo hace ya un tiempo.
http://notasdecampoyjardin.blogspot.com/2009/02/los-5-grandes-de-africa-el-elefante.html
Saludos
Está claro que todos los seres vivos nos comunicamos de un modo u otro.
un abrazo.
Hola, por qué no me sorprende?
desconocemos tantas cosas de estos y de otros seres maravillosos.
Saludos
Unos animales increibles. Aún tenemos mucho por aprender.
Estos descubrimientos no hacen sino demostrarnos que el mundo animal sigue lleno de misterios por resolver. Saludos.
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