Si alguna vez te has preguntado de qué modo y en qué medida podría llegar a afectar a los murciélagos la ingesta irresponsable de alcohol, puedes estar doblemente tranquilo: en primer lugar, porque parece ser que estos no presentan problemas para volar en estado de 'embriaguez', en segundo lugar (y no por ello menos importante) porque no eres la única persona de este planeta que se ha planteado semejante cuestión.
Bien es sabido por casi todos que los murciélagos tropicales de Centro y Sudamérica comen regularmente néctar y frutas fermentadas. Sin embargo, Brock Fenton, coautor del estudio llevado a cabo por la Universidad de Ontario (en Canadá), no estaba muy seguro de que algunas especies pudieran tolerar el alcohol a la hora de volar, así que se lanzaron a comprobarlo.
Para ello capturaron 106 murciélagos de seis especies diferentes en el norte de Belice, le dieron etanol en cantidad proporcional a su peso y luego les hicieron la 'prueba de alcoholemia' tomando muestras de saliva para medir el nivel de alcohol en sangre, siendo la tasa superior al 0,3% en algunos ejemplares (nivel que excedería los límites legales en el ser humano). A continuación hicieron pasar a los animales por un circuito cerrado en el bosque con varios obstáculos.
Fue al comprobar que los animales superaban con éxito las dos pruebas a las que habían sido sometidos cuando la sorpresa se hizo mayúscula en los científicos: además completar el circuito sin chocarse, la claridad de su 'pronunciación' en los sonidos que emiten (cuyas ondas chocan con los objetos y les sirve de orientación) era la misma de siempre.
De esta peculiar investigación se desprende que los murciélagos americanos tienen más tolerancia al alcohol que los europeos, ya que en su dieta hay más alimentos fermentados, lo cual "les brinda una ventaja evolutiva", ya que gracias a ello pueden comer alimentos que otros animales no pueden ingestar.
Lo que me extraña a mí es que nadie haya pretendido llevar este estudio por otros derroteros más relacionados con el ser humano y lo que algunos entienden por ocio de fin de semana.
Bien es sabido por casi todos que los murciélagos tropicales de Centro y Sudamérica comen regularmente néctar y frutas fermentadas. Sin embargo, Brock Fenton, coautor del estudio llevado a cabo por la Universidad de Ontario (en Canadá), no estaba muy seguro de que algunas especies pudieran tolerar el alcohol a la hora de volar, así que se lanzaron a comprobarlo.
Para ello capturaron 106 murciélagos de seis especies diferentes en el norte de Belice, le dieron etanol en cantidad proporcional a su peso y luego les hicieron la 'prueba de alcoholemia' tomando muestras de saliva para medir el nivel de alcohol en sangre, siendo la tasa superior al 0,3% en algunos ejemplares (nivel que excedería los límites legales en el ser humano). A continuación hicieron pasar a los animales por un circuito cerrado en el bosque con varios obstáculos.
Fue al comprobar que los animales superaban con éxito las dos pruebas a las que habían sido sometidos cuando la sorpresa se hizo mayúscula en los científicos: además completar el circuito sin chocarse, la claridad de su 'pronunciación' en los sonidos que emiten (cuyas ondas chocan con los objetos y les sirve de orientación) era la misma de siempre.
De esta peculiar investigación se desprende que los murciélagos americanos tienen más tolerancia al alcohol que los europeos, ya que en su dieta hay más alimentos fermentados, lo cual "les brinda una ventaja evolutiva", ya que gracias a ello pueden comer alimentos que otros animales no pueden ingestar.
Lo que me extraña a mí es que nadie haya pretendido llevar este estudio por otros derroteros más relacionados con el ser humano y lo que algunos entienden por ocio de fin de semana.
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2 comentarios:
Jajaja ni me lo había planteado, pero me ha hecho mucha gracia XDD Es que estos murciélagos cuando salen de marcha beben más de la cuenta, menos mal que controlan aún estando borrachos! jaja.
saluditos
Pues con el alcohol no, pero por todos es sabido que si se fuman un cigarro se cogen una borrachera la mar de curiosa.
P.D: Sí, es un poco cruel, pero de niños todos cometemos cosas que no se deben hacer.
Saludetes.
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