Un equipo internacional de científicos ha descubierto un comportamiento 'maternal' en garrapatas, tras una observación en las Grutas de Calcehtok (Yucatán, México), en donde se han estudiado ejemplares de garrapatas hembras, de una especie denominada 'Antricola marginatus', que tenía adosadas en su cuerpo entre 105 y 466 larvas que correspondían a su misma especie.
El hallazgo, además de curioso, es, según los expertos, "muy importante", ya que los únicos que presentan este comportamiento de tipo maternal entre arácnidos son las arañas, escorpiones, y arañas látigo, cuyas hembras llevan la descendencia recientemente eclosionada en su cuerpo durante unos días, hasta que pueda vivir independientemente.
Uno de los responsables del trabajo, José Manuel Venzal, ha explicado que, tras ingresar a las enormes Grutas de Calcehtok y realizar un recorrido de más de dos horas y media entre pasadizos, grietas y precipicios, el equipo llegó a "una bóveda en cuyo techo habitaba una importante colonia de murciélagos y desde el suelo, como montañas, se erigían depósitos de su excremento denominado guano".
Uno de los principales problemas en estos sitios es la falta de oxígeno, agravada por el penetrante olor amoniacal del guano, la alta temperatura y la humedad. Es precisamente aquí donde proliferan una serie de especies de garrapatas cuyos adultos y ninfas permanecen sobre el guano, y sus larvas parasitan a los murciélagos.
"Mientras se recolectaba rápidamente la mayor cantidad de ejemplares, llamaron la atención algunas garrapatas de gran tamaño con muchos ácaros recubriendo su cuerpo. Como sólo se contaba con la luz de las linternas frontales, y muchas veces dicha apariencia delata la utilización de la garrapata como medio de transporte, éstas fueron colocadas individualmente en tubos para una observación más cuidadosa", ha señalado Venzal.
Así, una vez en el laboratorio, los ejemplares cubiertos de ácaros fueron estudiándose y se descubrió que lo que recubría a las garrapatas adultas eran larvas. Al analizar y unificar resultados, los investigadores comprobaron que todos los ejemplares (ocho en total) eran hembras de la especie 'Antricola marginatus'.
El hallazgo, además de curioso, es, según los expertos, "muy importante", ya que los únicos que presentan este comportamiento de tipo maternal entre arácnidos son las arañas, escorpiones, y arañas látigo, cuyas hembras llevan la descendencia recientemente eclosionada en su cuerpo durante unos días, hasta que pueda vivir independientemente.
Uno de los responsables del trabajo, José Manuel Venzal, ha explicado que, tras ingresar a las enormes Grutas de Calcehtok y realizar un recorrido de más de dos horas y media entre pasadizos, grietas y precipicios, el equipo llegó a "una bóveda en cuyo techo habitaba una importante colonia de murciélagos y desde el suelo, como montañas, se erigían depósitos de su excremento denominado guano".
Uno de los principales problemas en estos sitios es la falta de oxígeno, agravada por el penetrante olor amoniacal del guano, la alta temperatura y la humedad. Es precisamente aquí donde proliferan una serie de especies de garrapatas cuyos adultos y ninfas permanecen sobre el guano, y sus larvas parasitan a los murciélagos.
"Mientras se recolectaba rápidamente la mayor cantidad de ejemplares, llamaron la atención algunas garrapatas de gran tamaño con muchos ácaros recubriendo su cuerpo. Como sólo se contaba con la luz de las linternas frontales, y muchas veces dicha apariencia delata la utilización de la garrapata como medio de transporte, éstas fueron colocadas individualmente en tubos para una observación más cuidadosa", ha señalado Venzal.
Así, una vez en el laboratorio, los ejemplares cubiertos de ácaros fueron estudiándose y se descubrió que lo que recubría a las garrapatas adultas eran larvas. Al analizar y unificar resultados, los investigadores comprobaron que todos los ejemplares (ocho en total) eran hembras de la especie 'Antricola marginatus'.
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3 comentarios:
Así que tambien llevan a sus crías, resulta interesante conocer comportamientos tan complejos en los animales más inesperados, y los invertebrados son fascinantes aunque no suelan ser nuestros preferidos.
Ahora que no sé yo si sería capaz de adentrarme en la cueva, no por los murcis, sino por las garras, por muy maternales que sean. Un saludo :).
lyuti - bueno, realmente el hábitat natural de estos seres no es muy agradable que se diga... Mejor nos quedamos en casa, con el pijama y las pantuflas jeje.
Aún así, no deja de ser un hallazgo curioso ¿verdad?
Un abrazo.
La información que tienes publicada es excelente
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